La granulomatosis con polivasculitis (GPV) es un tipo raro de inflamación de los vasos sanguíneos (llamada vasculitis) que afecta con mayor frecuencia a los senos paranasales, pulmones y riñones. La GPV es una enfermedad potencialmente grave que puede reducir el suministro de sangre a órganos vitales y, si no se trata, puede causar insuficiencia renal y complicaciones pulmonares.
La GPV afecta aproximadamente a tres de cada 100 000 personas
Afecta a hombres y mujeres por igual. Puede aparecer a cualquier edad, aunque es más frecuente entre los 40 y los 65 años
La granulomatosis con polivasculitis (GPV) y la polivasculitis microscópica (PVM) son dos tipos de vasculitis asociada a anticuerpos contra el citoplasma de los neutrófilos (ANCA) (VAA).
El término vasculitis significa inflamación de los vasos sanguíneos; no se trata de una sola enfermedad, sino de un término genérico que hace referencia a muchos trastornos que se caracterizan por inflamación de los vasos sanguíneos, lo que puede restringir el flujo sanguíneo y dañar órganos y tejidos vitales.
La VAA es una forma de vasculitis que afecta a los pequeños vasos sanguíneos del organismo y causa su inflamación. Esta inflamación puede hacer que se engrosen las capas de la pared de los vasos sanguíneos, lo que estrecha el vaso sanguíneo y reduce la cantidad de sangre que puede fluir a través de él. Esta reducción del flujo sanguíneo puede causar problemas graves e incluso dañar los órganos del cuerpo.
En general, la VAA afecta a los senos paranasales, riñones, pulmones y piel, aunque varían las formas en que se manifiestan las enfermedades.
La GPV y la PVM pueden empeorar rápidamente, por lo que su diagnóstico y tratamiento precoces resultan esenciales para prevenir el daño orgánico.
Aún no se conoce del todo la causa de la GPV y PVM. Ambos son trastornos autoinmunitarios, en los que el sistema inmunitario del organismo, su defensa contra las infecciones, ataca los tejidos sanos.
● Los anticuerpos se encuentran en la sangre y son producidos por el sistema inmunitario. Su trabajo consiste en combatir los gérmenes y otros invasores externos.
● En la GPV y PVM se produce un tipo nocivo de anticuerpos conocidos como autoanticuerpos (anticuerpos que atacan los tejidos sanos).
● Los autoanticuerpos que suelen intervenir en la GPV y PVM se conocen como ANCA. Los ANCA actúan contra los propios tejidos y células sanos del organismo. Provocan inflamación que se dirige y ataca a las paredes de los vasos sanguíneos de diferentes órganos.